Bueno, allá por 1939 Helmut Walter probó una nueva planta motriz de su invención en un submarino experimental: el V80. Lo cierto es que este ensayo tuvo éxito y el submarino llegó a superar los 25 nudos en inmersión.
Naturalmente, estas características causaron euforia en el alto mando de la Ubootwaffe, que ordenó proseguir su desarrollo. Un submarino que pudiese acercarse sumergido a esas velocidades a un convoy y lanzar una salva de torpedos, rompiendo el contacto cuando quisiera, era algo que no podía dejarse de lado.
Ya en 1942 empezaron a construirse algunos submarinos de propulsión mixta diesel/eléctrica//turbina Walter armados de dos tubos lanzarorpedos. Era el tipo XVII (series a y b) y entraron en servicio a finales de 1943 y principios de 1944. Ninguno hizo un crucero de guerra y sirvieron principalmente para entrenamiento de tripulaciones.
Los tipo XVII alcanzaban 25 nudos en inmersión con propulsión Walter.
Debido a diversos avatares (recortes presupuestarios, bombardeos, dominio aliado del mar, etc), el desarrollo y construcción del submarino de propulsión única por turbina Walter tipo XXVI (aunque también montaban pequeños motores diesel/electricos) se retrasó hasta 1945 y el único que llegó a construirse quedó destruido en la grada por un bombardeo.
El tipo XXVI hubiera alcanzado los 24 nudos en inmersión con propulsión Walter.
Este tipo de propulsión prometía ser la panacea, pero nada más lejos. Esa velocidad en inmersión tenía su inconvenientes en forma de peligrosa inestabilidad del peróxido de hidrógeno tanto en su manejo como en su almacenaje.
Una alternativa al peróxido de hidrógeno fue el motor diesel de ciclo cerrado. Esto no era más que un motor diesel normal que tomaba el aires para su combustión del oxígeno contenido en depósitos. Este tipo de submarino hubiese compuesto el tipo XXVII y se calculaba que podía alcanzar los 12 nudos sumergidos.
Tras la SGM, Rusia retomó la idea del tipo XXVII e investigó intensamente esta tecnología, desarrollando un pequeño submarino experimental (el M-401) que dio lugar al Projekt 615. Este nuevo submarino de 650 toneladas fue conocido por la OTAN como "Clase Quebec" y se construyeron 30 entre 1953 y 1956. Estos tenían 3 motores diesel; dos eran convencional y uno de ciclo cerrado usando oxigeno líquido.
En el sistema soviético, llamado "sistema de propulsión único", el oxigeno era añadido después de que los gases de escape habían sido filtrados a través de un absorbente químico basado en cal. El submarino podía operar sus motores diesel usando un snorkel. El "Quebec" contaba con 3 motores: un 32D de 900 bhp en el eje central y dos M-50P de 700 bhp en los ejes exteriores. En adición un motor de arrastre de 100hp fue acoplado al eje central. El submarino podía avanzar a baja velocidad usando únicamente el motor diese central.
Debido a que el oxigeno liquido no puede ser almacenado por gran cantidad de tiempo estas naves no podían operar muy lejos de sus bases. Además era un sistema peligroso, al menos 7 submarinos sufrieron explosiones, y uno de esos, el M-256, se hundió después de una explosión e incendio a bordo. Fueron llamados “encededores de cigarros”. El último fue desguazado a principios de los 70.
Hoy día, el hidrógeno sigue siendo empleado como elemento portador de energía para el proceso electroquímico en el interior de las Células de Combustible de los actuales submarinos con propulsión AIP.
¿Por cierto has tenido ocasion de visitar el tipo XXI (U- 2540) que está expuesto en Bemerhaven como museo flotante?... la verdad es que un submarinista de nuestros dias "casi" se sentiría en "casa" a bordo del mismo
Es una de mis asignaturas pendientes, Paul. Ya sabes que algunas veces los gustos turísticos de un matrimonio no son siempre los mismos y tenemos que repartilos
Saludos.